LA FAMILIA DE REGRESO
LA FAMILIA DE REGRESO
En esa ocasión se recuperaron los ceremoniales de antaño;
algo de penumbra y misterio, silencio y todos preparados en la mesa del consejo
de familia antes de que el capo, el padrino, Don Pito, hiciese acto de
presencia para celebrar el cónclave con los miembros de la familia a los que el
propio Pito Sanchone había seleccionado. Por fin se abrió una puerta lateral y
la figura del jefe se desplazó hasta una silla ubicada en la presidencia de la
mesa.
Miró durante un largo y silencioso minuto con aire
pontifical a los asistentes hasta que se dignó a abrir la boca.
-Miembros de la familia. Os he llamado porque el consiglieri Josele Delcys ha cometido
alguna imprudencia con unas maletas y ha sido preciso que se tome unas vacaciones
por un largo tiempo. Existía el riesgo de que su osadía nos echase encima a
algunos jueces de los que no tenemos en nómina. Por lo que su ausencia en el
trabajo y en sus funciones anteriores hace que sea preciso reorganizar todo el
consejo de familia.
Los convocados se miraron entre ellos sin hacer comentario
alguno. El silencio era sepulcral. Don Pito continuó:
-
Vuestra madrina, Begochu, seguirá al frente del
sector negocios. Esto no hace falta cambiarlo, ni dar explicaciones
adicionales.
Murmullos de aprobación. El capo tocó la mano de su mujer sentada
a su derecha, antes de dirigirse a la que ocupaba la silla de su izquierda.
-
Cantante, tú estarás a mi lado. Quiero tenerte
controlada y vigilada todo el rato; en caso contrario puedes meter la pata de
forma reiterada. A tu puto aire, eres un verdadero peligro
-
Gracias, padrino. ¡Qué ilusión me hace! ¡Todo el
rato contigo! ¿Sabes que me han hecho una canción?
-
No
-
Una canción inspirada en mí y para que yo la
cante. Como cosa que veo cosa que me la quiero cargar; miro restaurantes pues me los cargo y además
dada la forma con la que abrazo a los señores, pues me han hecho una bonita
canción. Dice:
La tarántula e un bicho mu malo,
No se mata con piedras ni palos.
-
Bueno, bueno, Cantante, luego me la cantas
entera.
-
Vale Don Pito. La tarántula e un bicho mu malo.
Hubo algunas toses para ahogar las
risas. Y Don Pito, muy serio prosiguió anunciando los cambios.
-
Mary Shu Malos Pelos va a ser la encargada de
controlar y dirigir las finanzas de la familia. Lo que incluirá el tener el
dinero lavadito y buscar alguna que otra nueva oportunidad de negocio, al
margen de las realizadas por Begochu, claro. ¿Qué te parece Mary Shu?.
-
Estamos trabajando intensamente para,
efectivamente, alcanzar la posición que permita llegar a los acuerdos
necesarios y recurrentes para que las finanzas se comporten de forma financiera
y consecuentemente sea todo contingente. Estamos, como digo, trabajando
intensamente.
El padrino sonrió complacido
-
Así me gusta Mary Shu.
Buñuelos Feliz puso cara de ansiedad al intuir que iba a ser
el siguiente al que se le encomendara alguna función importante dentro de la
familia. Y efectivamente Don Pito Sanchone se dirigió a él.
-
Tú te vas a encargar de hacer la masa.
-
¿Para los buñuelos?
-
¡Qué buñuelos, idiota! La masa en la que
envolver a las familias que controlan los otros territorios. Quiero que nos
deban favores. Has de amasar las relaciones con los Ravioli del nordeste, los
Sabiniano del norte y los Gaiteri del noroeste.
-
Entendido padrino
-
Además trabajarás para incrementar el número de
jueces y fiscales que tenemos en nómina o bajo algún tipo control.
-
Puedes confiar en mi Don Pito
E hizo un gesto como de besar la
mano del capo.
-
Te Rorismo Rivera va a ocuparse del cobro a las
grandes empresas por la seguridad que les proporcionamos. De una u otra manera
las compañías han de repartir su dinero con nosotros dada la protección que les
brindamos. En eso hemos de ser implacables. ¿Queda claro, Te?
-
De acuerdo Don. No te preocupes, con mi arma de
dar calambres nadie se va a escapar.
-
Y te he dejado para al final Oscar L. Brasi
porque tu trabajo nos afecta a todos. Eres el responsable de nuestra seguridad
y protección. Debemos estar tranquilos todos nosotros sabiendo que nuestras
espaldas están bien cubiertas.
-
No te preocupes Don Pito. Sé lo que tengo que
hacer para ese objetivo.
-
También te ocuparas de “invitar” a volver al
redil a todo el que quiera volar sin nuestro permiso, jueces, policías,
miembros de la familia que les de por tomar sus propias iniciativas.
-
¡Uuyy! Eso es lo que más me gusta.
Don Sanchone alzó la mano con el dedo índice levantado para
recabar la atención y dijo:
-
Lo primero que vamos a hacer es actuar para
controlar el juego. Vamos a implementar la quiniela del baloncesto. Y el que
quiera jugar que lo haga con nuestra quiniela.
-
Padrino, perdona, pero no vas a poder desbancar
a la del futbol, la primitiva….
Esta vez Buñuelos Feliz salió en ayuda de Cantante:
-
Don Pito,
Cantante tiene razón. No vamos a poder con el futbol y las loterías.
-
Buñuelos, pues te hago a ti especialmente
responsable del éxito del proyecto. Coge el avión y vete a Barcelona a hablar
con los Ravioli. Ellos son expertos en imponer cosas como un idioma; no sé, si
es preciso habla con el mismísimo señor Sin Coche.
Cantante levantó la naríz.
-
Capo di capi ¿Quién es el señor Sin Coche?
-
¡Ay esta gente que no habla inglés! Pues el
señor Car Less.
-
Pero que listo eres Don Pito.
-
Bueno,
todos a trabajar que tengo que ir a ver la NBA.
Se levantó y se dirigió a la puerta por la que había entrado
dejando mudo y sentado a su consejo de
familia.
Equipo de La
Resistencia
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El destino
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